lunes, 25 de marzo de 2013

Departamento de Investigación en Psicoanálisis con Niños - NRC

Variedades en la autoridad. Ficciones actuales

Adriana Laión

Como se desprende de la lectura del argumento del Seminario  Internacional uno de los efectos que constatamos de la feminización del mundo es la crisis de autoridad, crisis que se verifica en el hecho del estallido de los lazos entre padres e hijos, entre maestros y alumnos, médicos y pacientes, entre las palabras y los cuerpos.
Lazos que en muchos casos solo es posible regularlos vía la judicialización que intenta establecer derechos y obligaciones para cada parte y que se encuentra con indeclinables posiciones que resultan muy difíciles de conciliar, ya que también  ha caído la estructura de semblante que la misma justicia representa.
En el Departamento de Investigación de Psicoanálisis con niños a partir de verificar esta crisis, que ya escuchamos y tratamos en nuestra practica desde hace mucho tiempo, nos propusimos dar un paso más y trabajar alrededor de las nuevas formas de la autoridad.
Primero pensamos trabajar sobre las “declinaciones” de la autoridad, declinaciones es un término que  en nuestra lengua nombra mejor lo que cae, lo que baja,  y no terminaba de decir bien lo que queríamos enunciar, por lo cual nos pareció nombrar las variedades de la autoridad que nos evocaba  a la varite – verdad, una forma no-toda,  un modo de decir lo que se pone en cruz con este tema y también lo que posibilita.
A partir de este nuevo régimen de existencia es necesario poder disponer de una ductilidad para leer las variedades de la autoridad y lo que se ha inventado para hacerlas existir.
Esos inventos toman la forma de ficciones, interpretando a las ficciones de lado  de la fixion-fijación de un goce que se escapa y que solo desde el  trabajo con un psicoanalista podemos producir el pasaje a una escritura, a lo que hace letra para cada parlêtre,  a un modo de uso posible.
Otra perspectiva que queremos introducir es tomar al psicoanalista mismo como una nueva forma de ficción, su práctica no es la misma de antaño, su presencia con el cuerpo es necesaria en lo ilimitado de un goce, en el desvarío de padres y docentes frente a los estallidos de los cuerpos y las palabras de niños y adolescentes.
Las ficciones actuales abren un abanico para pensar modos posibles que el discurso analítico aloja en la época de la inexistencia del Otro, diferente de las clasificaciones universalistas o de la ley de hierro.
Para presentar este tema en el Seminario Internacional hemos invitado a Ana Lydia Santiago, miembro de la Escuela Brasilera de Psicoanálisis, AE en funciones y miembro de la NRC, Claudia Lijtinstens, miembro de la EOL-Sección Córdoba, corresponsable del Departamento 
y a Silvia Perassi, adherente del CIEC, integrante de los grupos de investigación del Departamento, la mesa estará animada por Gabriela Dargenton AME de la EOL-Sección Cordoba, coordinadora general del Departamento .

domingo, 24 de marzo de 2013

La feminización se revela también por las nuevas posibilidades del orden social

       José Vidal

En el marco del trabajo hacia el Seminario Internacional, le realizamos una entrevista a José Vidal, coordinador del Departamento de psicoanálisis y política del CIEC:

               -  El Departamento de Política Y psicoanálisis del CIEC ha estado investigando mucho sobre   el  tema de nuestro próximo Seminario Internacional. Hay una especie de acuerdo con que La feminización del mundo, no equivale al reinado de la mujer en lo social, lo político y económico. Sin embargo, ¿podemos pensar que lo incluye de alguna manera?

J.V.: La feminización del mundo es efecto del impacto en la subjetividad de la ciencia asociada al capitalismo. Ese impacto provoca la decadencia del orden patriarcal que se funda en la sumisión y represión de las mujeres porque el discurso de la ciencia desnuda los semblantes y hace imposible creer en ellos. Esto se traduce entonces en que la plaza pública, antes reservada a los hombres, sea ahora ocupada también por las mujeres, es el pasaje de lo privado a lo público. Pero esa feminización se revela también por las nuevas posibilidades del orden social. Que en Norteamérica gobierne un negro, que exista el matrimonio igualitario o que las escuelas, incluso las militares, sean mixtas es parte del mismo proceso, lo que estaba oculto, marginado, segregado, puede ahora manifestarse.

-          En el pasado Congreso de la AMP, escuchamos situar un “efecto feminizante”. Efecto que se produce a partir de que la ciencia hace del sujeto, objeto de su discurso, y esto se extiende para el hombre y la mujer. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

J.V.: Esa expresión contiene una advertencia sobre un peligro sobre el avance de la ciencia. Es como una amenaza de fin del mundo. Yo no lo veo así. Me gusta pensar al discurso de la ciencia como histérico, que pone como agente a un sujeto dividido, que interroga, pregunta, indaga y de ese modo cuestiona los lugares y los saberes constituidos. Ante una interrogación así los semblantes vacilan porque el saber que producen no alcanza a saturar el objeto de la ciencia que no se agota con ningún saber. Pregunta como lo hacen los niños, incomodando a los adultos. La serie Padre- falo- hombre en la que se organizaba lo social sucumbe ante su falta de sustento y eso produce una imposibilidad de organizar lo social en torno al Universal, al Todo/Uno y nos obliga a pensar nuevas formas funcionamiento de lo social y de los individuos. Es decir, nos obliga a inventar y a confiar en las posibilidades de invención de los sujetos.
Los guardianes del orden simbólico, sin embargo, se apropian de los avances científico- técnicos y organizan un discurso cientificista, la ciencia como religión, más parecido al discurso universitario, que trata de parchar las grietas de ese orden con una proliferación normativa, como ocurre con la psiquiatría, con los manuales diagnósticos, con cierto psicoanálisis, con la religión y con los líderes mesiánicos. En ese punto también debemos ver los esfuerzos de hacer ascender a La mujer como existente al cénit de lo social, una suerte de nuevo Universal que, como un nuevo nombre-del-padre venga a reemplazar al anterior en la creencia de que la mujer sabría mejor manejar las diferencias en la política al ser menos competitiva. Esta no es la orientación del psicoanálisis que apunta a la posición femenina en el sentido de rechazar todo Universal en su práctica para alcanzar la singularidad del síntoma

-          En la entrevista que "Contingencia" le realiza a Leda Guimaraes, ella habla de una nueva  máscara  de la feminidad contemporánea que surge como un ideal muy fuerte al que las mujeres se alienan. Y la novedad es que ese ideal no es del campo de lo simbólico, sino fundamentalmente del campo imaginario. ¿Cómo pensás esta afirmación?

J.V.: Leda ha trabajado sobre ese empuje superyoico a la mujer total, la que debe trabajar, ser profesional, buena madre, bella, inteligente, buena amante, etc. Es una de las formas que mencionaba yo de hacer existir La mujer como universal que, como nos indica Lacan, no existe. La mujer, tachando el La, es para nosotros una forma de decir que la relación sexual no existe. De ese modo La mujer es la pura alteridad, lo Otro respecto al discurso centrado en goce fálico, masculino, que se cierra sobre sí, autoerótico. Decimos más allá del Edipo freudiano, más allá del padre, más allá de la castración, más allá del significante en definitiva, y buscamos allí lo que puede hacer que un análisis se termine, que alcance su fin en un lazo social posible. Pero ese Otro no es un universal, solo puede pensarse desde el uno por uno, en la singularidad.
Ese empuje a la mujer total, que son figuras imaginarias, que no alcanzan a reemplazar a los antiguos ideales simbólicos, es un nuevo intento de sometimiento de la mujer, de conjurar los demonios que lo femenino representa aún para nuestra cultura. Todo ese discurso acerca de la sexualidad femenina, sobre el orgasmo femenino, sobre mujeres capaces de gozar así o asá, sobre el punto G es pura psicología destinada a poner en caja lo que lo femenino tiene de inapresable. El psicoanálisis no hace psicología, no busca describir el comportamiento femenino desde el para todas sino que reconoce en las mujeres una mayor proximidad un goce no fálico que, de modo contingente, podría alcanzar.

-          Has trabajado el tema de las mujeres y la violencia. ¿Pensás que el femicidio, un tema tan actual y que afecta cada vez  en mayor medida  a la sociedad de nuestra provincia especialmente, es uno de los efectos de la feminización del mundo?

J.V.: Pienso que es un modo de satisfacer un fantasma masculino. Los medios amplifican, ponen la lupa sobre los femicidios, que no creo que sean más que en otros tiempos, y de ese modo se produce un “se pega a una mujer”, como decía Freud en “Se pega a un niño”, un “se” anónimo que permite una satisfacción inconsciente de aquellos que temen al desencadenamiento de lo femenino en la sociedad y en el interior de su pareja. Pero, por suerte, los que pasan al acto son una minoría, en el crimen pasional. La inmensa mayoría de la sociedad, hombres y mujeres, dan la bienvenida a los cambios que liberan enormes potencialidades, dignidades, y formas inéditas de vida.
Hay que avanzar en las libertades de los sujetos, las mujeres al emerger permiten una mayor libertad para todos, pero también evitar la victimización de las mujeres que las reduciría nuevamente a la sumisión respecto a los defensores de las víctimas.

·         Agradecemos la amable colaboración de José Vidal.

Entrevista realizada por Eugenia Molina
Coordinadora del área de Enseñanzas del CIEC


 

Miscelánea...

Por Norah Pérez

Directora de la EOL- Sección Santa Fe
                                                                                               

 Hay expresiones que nombran hoy fenómenos tales como: la feminización de la politica,  la feminización de la pobreza,  la feminización de la violencia, etc… al modo de un concepto ampliado en su uso y  aplicable a fenómenos  en los cuales convergen  lecturas sociológicas .
J.A.Miller en el VII Congreso de la AMP  París - 2010 ;  estableció puntuaciones donde diferenciaba claramente, el interés del sociólogo del nuestro.
Del lado del analista ubicó el alcance de una pregunta :
 …y esto ¿en qué me toca?.
Ir más allá de  empatizar con el sentido común de la época, ¿seria posible sin un despertar del deseo del analista?.
Javier Aramburu,  en “El deseo del analista”, plantea …
 Los analistas, […]nos dirigimos a la época; pero, no estamos identificados con ella, estamos un poco más allá de la norma, del modelo común, identificados con el síntoma y no con la época pero en la época, pues esta distancia es la que nos permite hacer legibles los síntomas de la época sin ser idénticos a ella.  […[ la época es la realidad del fantasma, es la realidad sostenida en el fantasma.  (1)

Lacan  en la “Dirección de la Cura y los principios de su poder”, (2) demuestra que cuando la función queda afectada,  la impotencia se desliza hacia el ejercicio de un poder.
J. Carlos Indart en la Sección Rosario el año pasado, abría estas preguntas en el marco del 1er.Coloquio Seminario (*) que trabajó este escrito de Lacan.
Allí puntualizaba:
¿Qué hacer?. Con cada paciente que no es claro que quiera venir a analizarse, no es claro que no sea una psicosis, hay que decirle a veces que se drogue menos para venir a sesión, etc. Hay un clima de… ¿qué hacemos?...

Una analizante al final de una sesión, sorprende al analista anunciando una decisión unilateral.
 Comenta -como al pasar -, que va a suspender su tratamiento.
Las razones  - hasta entonces silenciadas - , forman una clase homogénea  de  gastos a recortar: “la peluqueria, la empleada doméstica, la masajista y  la analista ”.
Los semblantes del analista logran  hacer pasar  el efecto sorpresa,  del lado de la analizante.
Momento transferencial que conmueve la defensa.
La intervención del analista en la perspectiva de hacer escuchar el mensaje invertido, hace audible para la analizante, dicha homogeinización.
 Es tu trabajo”-repetía-,  salvando un ideal de  justicia distributiva que enarbolaba el derecho de cada quien a cobrar por su trabajo;  vía que justificaba su escamoteo de la interrogación, frente a una responsabilidad subjetiva en esta decisión solitaria.
El no querer saber entra en la escena analítica en ese momento, bajo el signo de una transferencia negativa.
La  interpretación mínima logró producir efectos que dividieron a esta sujeto.
Hacerle escuchar, “Es tu trabajo” “acá eres tu quien trabaja”, en la perspectiva de su propio mensaje invertido; operó un  doble movimiento.
Del lado del efecto sujeto y del lado del efecto de sentido; lo cual desafectó  la función del analista que permanecía en el eje especular de los prestadores de un servicio.
La vacilación de la analizante, a la salida de esa sesión, verificó un descompletamiento.
Se localizó un impasse.
Si el sujeto consiente en pagar con su goce, se abre una nueva relación a su inconsciente.

Lo borrado del mundo simbólico, retorna en patologías actuales que  profundizan el delirio de un inconsciente sin el síntoma, o  el delirio de un síntoma sin inconsciente. Delirios de la vida cotidiana, las locuras ordinarias, menciona E.Laurent.(3)  
La feminización del mundo  como nuevo sintagma  ¿Abre nuevas alternativas en esta dirección? ¿Qué obstáculos identificamos? ¿Cómo toca un analista con su invención los impasses del deseo? ¿La invención desplazaría el uso de un poder?
La fórmula I > a que correspondió a la colectivización en torno al ideal, con su correspondiente malestar en la cultura , e hizo del escrito homónimo de Freud , un legado para los analistas de varias generaciones cuya práctica estuvo enmarcada en torno al Nombre del Padre.
  Lacan extrae otra fórmula de su práctica,  la de la caída del nombre del padre en la época del Otro que no existe.
 Entonces I < a  produjo una escansión  en la experiencia analítica!. ¿ Cómo ponemos a punto  la práctica del psicoanálisis en el siglo XXI del lado de la salvación por los desechos, cuyos trozos de real orientan, una vez desactivados, a la invención cada vez.”?.

“No pensamos que la “feminización del mundo”, como lo dijo Jacques-Alain Miller, es el anuncio de una “reconciliación de los sexos, ni la desaparición de los hombres. Se abre una posibilidad de desplazar las figuras del superyó femenino para un hombre.”(4)

(1).Javier Aramburu; El deseo del analista;pág. 303; Tres haches.
(2)Jacques Lacan; escritos 2; pág.565;Ed. Siglo XXI.
(3)Eric Laurent; el sentimiento delirante de la vida ;pág.51/63; Colección Diva.
(4)Entrevista a Eric.Laurent , preparatoria al Seminario Internacional “La feminización del mundo :invitado Guy Briole”.
(*) Jacques Lacan. La Dirección de la Cura y los principios de su poder. Escritos 2. Siglo XXI.

 EOL Sección Rosario. Coloquio Seminario.
(*) 1er. Coloquio Seminario, Juan Carlos Indart. Set. 2012.
(*) 2° Coloquio Seminario. Jorge Chamorro. Nov. 2012

La feminidad emergente en el cine

Entrevista a Victoria Giordana
 La Comisión Organizadora del Seminario Internacional conversó con Victoria Giordana, cineasta cordobesa, realizadora del corto “La Virgen de las Candelas”.
Este film fue proyectado el año pasado en el ciclo de cortos “Miradas de Mujer”, del Departamento de Psicoanálisis y Política, y en este blog encontramos también una intervención de Jorge Assef, comenta{andolo ( Véase etiqueta INTERVENCIONES)

-       La feminidad emergente el  siglo XXI es un sintagma que nos interroga en tanto se constata la ocupación cada vez mayor de la mujeres en los diferentes sectores de poder económico y político, en la igualdad de derechos de las mujeres con los hombres, en la simetría existente en los lazos, donde las diferencias con el Otro sexo tienden a diluirse:
            ¿Este es un fenómeno que ocurre también el cine?
 
V.G.: Desde los comienzos del cine, mujeres pioneras hicieron fuertes aportes pero desde un lugar acotado y carecieron de legitimación. Hoy el  fenómeno de una feminidad emergente es visible ya que hay una mayor cantidad y calidad de obras dirigidas por mujeres que se erigen para dar testimonio de lo femenino con una gran frescura, heterogeneidad y autenticidad, no ya como objeto de la mirada masculina sino desde una propiamente femenina. En mi percepción esta presencia de la mujer,  en el cine coexiste y contrasta con cierta dosis de sexismo y la misoginia aún presentes, donde se replican los arquetipos de mujer creados por y para el hombre. Esta presencia femenina emergente viene a decir: “hay mucho más”.
           - ¿Cómo ves en el siglo XXI la participación de las mujeres en las artes    
            audiovisuales?
V.G.: Creo que se está abriendo el juego, pero que hay mucho camino por hacer. Es evidente que hay un creciente número de mujeres cineastas reconocidas nacional e internacionalmente. Sin embargo aún es un campo dominado por hombres, especialmente el cine hegemónico y el ámbito desde donde las obras audiovisuales se legitiman, por ejemplo: festivales y crítica cinematográfica. Al mismo tiempo es alentador ver que hay un mayor número de destacadas directoras, guionistas, directoras de fotografías (roles tradicionalmente considerados masculinos), antes la mujer ocupaba generalmente el rol de productora, directora de arte, asistente, continuista o editora (roles en los que la mujer era bien aceptada) hoy se empieza a ver hombres produciendo a directoras, lo cual es un cambio significativo.
Existe un prejuicio generalizado en el espectador común sobre como es el cine dirigido por mujeres, pero que creo se irá dilapidando a medida de que exista una mayor cantidad de directoras y guionistas, con una mayor diversidad de voces, estilos y géneros.

-       Nos interesa preguntarte si el lugar  de lo diferente como fuente de lo que es rechazado lo ocupa en el corto la figura femenina?

V.G.: En el cortometraje la mujer ocupa el lugar de lo diferente, de lo prohibido, que es rol que la mujer ocupa en la tradición judeocristiana. Dayo, la mujer en la historia, llega y convulsiona el orden en el cual los personajes se encuentran, ella despierta una pasión, que es tanto espiritual (una compasión cristiana y el deseo de evangelizarla) como erótica en uno de los personaje, también destapa el amor prohibido en uno de ellos. Dayo ocupa el lugar de la tentación, el deseo, no un cuerpo sin espíritu sino un todo, profundamente humano, que sacude a los personajes de su seguridad, sus hipocresías, y por último creo que ella representa: la libertad.

+ Agradecemos la colaboración de Victoria Giordana

Esta entrevista fue realizada por Silvina Sanmartino- miembro de la Comisión Organizadora del Seminario Internacional

Departamento de Investigación de Psicoanálisis con Niños . NRC


Algunas reflexiones  e interrogantes

Por Raquel Narbona

A partir de los años 70 Lacan inicia  el camino de una elaboración del no –todo considerado por él como su “verdadero tema”  y así sacar algo nuevo y /o echar luz respecto a la sexualidad femenina.
En esa época acentúa y separa en la mujer su feminidad en relación a un goce suplementario y como tal no se localiza en el falo, un goce que es del orden de lo innombrable, sin sentido y al mismo tiempo infinito ya que no cuenta con el límite fálico.
A su vez frente a un Otro que cada vez se desmorona en su función nos deja confrontados a un goce del Uno sin amarras, desencadenado, desencajado que nos aproxima a un real sin ley indomable y por fuera de todo programa.
Una de sus consecuencias es el ascenso del objeto a que se muestra y se presentifica para cada quien sin velo y sin tapujos. Es la subjetividad la que se trastoca con síntomas que afectan a lo social.
¿Podríamos plantear hoy en día que este modo de gozar femenino- que no todas experimentan-  no es tan solo inherente a la singularidad de una mujer sino que trasciende, se desplaza al hombre y repercute en la civilización?

 En cuanto al niño y/o adolescente cómo y en qué medida lo afecta este panorama? Qué efectos encontramos en la clínica? Cito algunos ej: niños que se hacen responsables de impartir órdenes a sus padres ante el descrédito y caída de la autoridad parental. Así el sujeto niño aparece dictando normas a sabiendas o no de sus derechos.
En un otro extremo nos confrontamos con sujetos sin defensas frente a exigencias parentales que se tornan hasta delirantes. Y la relación madre-hija estragante? ¿Qué efectos devastadores se producen y a qué conducen?  ¿Y las situaciones de violencia en las escuelas en donde los niños y adolescentes son protagonistas puede ser reducida bajo el nombre de “acoso escolar”?
¿Cómo respondemos los analistas y qué estrategias implementamos desde una ética a la medida que nos posibilite estar a la altura de la época?










sábado, 16 de marzo de 2013

LA FEMINIZACIÓN DEL MUNDO NO ES LA RECONCILIACIÓN DE LOS SEXOS


Eric Laurent

El CIEC le realizó tres preguntas a nuestro asesor Eric Laurent en vistas al próximo Seminario Internacional

CIEC - En el Curso "El Otro que no existe y sus comités de ética" usted retoma la referencia de Lacan en la cual diferencia entre creerla y creerle a una mujer, entre un régimen que la fija al superyó y la posibilidad de que al hablar sobre el síntoma de una manera menos estorbada por el falo, pueda decir algo más sobre la distribución efectiva del goce y del malestar en la cultura ¿Cómo se relaciona esta ultima perspectiva con lo que llamamos la feminización del mundo?

E.L: No pensamos que la “feminización del mundo”, como lo dijo Jacques-Alain Miller, es el anuncio de una reconciliación de los sexos, ni la desaparición de los hombres. Se abre una posibilidad de desplazar las figuras del superyó femenino para un hombre.

CIEC - Tal como usted lo plantea en el  Paper N°1 hacia el VIII Congreso de la AMP "El orden simbólico en el siglo XXI", el principio de autoridad se ha visto afectado ante la liberación de la relación con el Otro y sus semblantes. ¿Cómo piensa las nuevas formas de autoridad desde la perspectiva de una feminidad emergente?

E.L: La vacilación de la cual hablo se verifica en las nuevas autorizaciones sobre      las maneras de formar parejas. La autorización cada vez más extensa de las parejas de mismo sexo con la extensión de los derechos a tener hijos, sea con adopción o procreación medicamente asistida son producciones de nuevas formas de autoridad.
CIEC - En la entrevista realizada por Pablo Chacón recientemente en Bs. As. usted manifestó que las mujeres viven su vida de una manera particular, que es diferente al individualismo de masa. Podría decirnos algo más sobre esa insistencia en la particularidad y su relación al lazo social.

E.L: Las mujeres quieren mantener su particularidad sin la identificación al todo fálico. Quieren ser fálicas a su manera propia. Resisten a la industrialización del fetichismo. Recuerdan la necesidad de desear. No ceden en este punto.
  • Agradecemos la valiosa colaboración de Eric Laurent

Hay un real propio de nuestra época

Guy Briole

 
Presentamos parte de la entrevista  que Mediodicho (publicación de la EOL- Sección Córdoba) realizó a Guy Briole, nuestro invitado  al Seminario Internacional.

Mediodicho: Para adentrarnos en el tema del próximo Congreso de la AMP “Lo real en el siglo XXI", nos encontramos con una clase de J.–A. Miller de su curso “Todo el mundo es loco” (30-01-2008) en donde plantea que el real particular del psicoanálisis está situado en el campo de la sexualidad. ¿Cómo se traduce hoy en la sexualidad ese “desorden”? ¿Con qué respuestas sintomáticas nos encontramos los psicoanalistas en ese campo?

Guy Briole: El próximo Congreso de la AMP tendrá lugar en París en 2014 con el título: “Lo real en el siglo XXI”. Usted  hace bien en llamarnos la atención sobre ese curso de Jacques-Alain Miller, pero insistiré más en la parte en la que demuestra cómo la mundialización justifica, valida, “la subida al cénit” de los significantes amos, tales como el número, la cantidad, la medida (Miller, “Todo el mundo es loco”). “Hay un real” propio de nuestra época y los ecos del real están en todas partes en el mundo presentándose en “un gran desorden”. El real que Lacan sitúa en el campo de la sexualidad, y el goce que está en juego, indexa un disfuncionamiento absoluto, aquel de la relación “desordenada del ser hablante con su propio cuerpo”. Por lo  tanto, se trata más de la relación del sujeto con ese goce que con el partenaire. El acento está puesto en lo que obstruye  la relación entre los sexos; no hay relación sexual. El encuentro amoroso siempre tiene que ver con una contingencia que confronta al sujeto con su propia castración, al fracaso. A lo que en el sujeto podía derivar en un motivo de demanda de análisis, la ciencia le propone hoy proveerlo de “un equipamiento para la no relación” que le garantizaría la felicidad. Puede llegar a creerlo, pero el real de su condición de ser hablante termina por recuperarlo, es el momento en que puede volverse nuevamente hacia el psicoanalista.

·         Extracto  de la entrevista realizada por Eugenia Molina a Guy Briole en Mediodicho 38 - Lazos sexuales


Cuatro elaboraciones sobre La Feminización del mundo


 Próximo encuentro

Miércoles 20 de marzo de 2013

9,30 hs.

 La feminidad emergente

Presentan: Roxana Chiatti y Graciela Martínez, Departamento de Estudios Psicoanálisis y Cuerpo -  Claudia Lijtinstens y Dora Saroka,  Red de la EOL Sección Córdoba
Coordina: Marcela Piumetto

Aula de Rehabilitación del Hospital Neuropsiquiátrico

Actividad no arancelada




Game change


Un esfuerzo más, para ser republicano!!

Comentario de la película "Game change"


Por Diana Paulozky


Y cuál fue el esfuerzo que hicieron los republicanos en la primera elección que pierden frente a Obama?: Elegir a una mujer!
"Game Change " , "Cambio de juego", de Jay Roach, es una película americana que muestra  como una mujer como Sara Palin, gobernadora de Alaska, llega a ser candidata en el 2008, a ser vicepresidente de los republicanos.
  Es interesante por dos motivos: representa la realidad de un modo muy fidedigno y nos hace reflexionar sobre los vaivenes del poder. El segundo motivo, para analizar, es el lugar que se le da a lo femenino.
Al comienzo del film, vemos a McCain y su equipo sorprenderse frente a las imágenes del carisma de Obama. Miran el discurso en una pantalla, y sin salir del asombro, frente a una multitud que lo ovaciona, uno de ellos reflexiona, respecto a sus atributos,  que la razón del éxito de Obama es que es un artista.  Concluyen así, que es necesario un golpe de efecto. Para esto deciden buscar a alguien que sea también artista para asegurarse al menos, el voto femenino. Y que mejor que una mujer!!! Una mujer con el carisma o más, de Obama, que tenga oratoria y seducción.
A modo de un casting, en el que piensan cada una de las mujeres posibles, en función de estos atributos, eligen a la gobernadora de Alaska, Sara Palin que era muy atractiva, de excelente oratoria, determinante y fuerte.
Lo que ellos no sabían es que habían encontrado exactamente lo que buscaban: una artista. Ella era tan determinante como inconsistente, o sea, una  estrella fugaz!
Por qué suponer que una mujer podría atraer más votos?
Porque hay un saber que afirma que la mujer tiene más afinidad a ofrecerse como objeto de deseo. El hombre desea y la mujer se hace desear. Claro que esa generalidad no es suficiente y el caso de Sara Palin, así lo prueba. Tenemos presente la advertencia que nos hace Lacan, que la diferencia hombre-mujer, no siempre corresponde a la repartición niño-niña y es necesario tenerlo en cuenta a la hora de mantener las diferencias clínicas. Lo importante y novedoso es la confianza y la esperanza que hoy se le da a  lo femenino.
Del lado de ella, podemos ver que estaba identificada al falo, esa era su posición  en Alaska y era eso, lo que la sostenía. En el momento en que ella no puede sostenerse en ese lugar y se convierte en objeto de los republicanos,  empieza su caída.
Cuando pasa de ser falo a objeto de burla de comediantes, se desestabiliza al punto de extrañar su mundo: su tierra, su familia...su bebé. Necesita refugiarse en la madre, allí donde la mujer es ridiculizada por el otro social. Se desestabiliza cuando ve su imagen  al servicio de burdos imitadores.
Por el lado de los republicanos, se equivocaron en creer que era ella el falo y por supuesto que no sabían que el falo era sólo un significante que sirve a quien lo sustenta, pero no se lleva pegado en el cuerpo, es apenas un nombre que ella pierde al dejar su lugar, su vida, sus referentes. Apostaron a la mujer, porque creyeron en su falicismo, olvidando que a los semblantes hay que sostenerlos.
Una vía interesante a pensar, es lo que nos indicaba Eric Laurent en las últimas jornadas  nacionales, respecto al empuje, en la actualidad, hacia lo femenino.
El discurso femenino apunta a  lo particular, introduce la mirada al otro. Lo típico de la posición femenina es el cuidar al otro, el" take care", como nos decía Eric Laurent. El discurso femenino produce un efecto de distinción en medio de la masificación, lo que no es poco.
Los  republicanos no se equivocaron en principio. Faltó un esfuerzo más...



Reseñas

Cuatro elaboraciones sobre la feminización del mundo

    Reseña del segundo encuentro



El pasado miércoles, 6 de marzo, tuvo lugar la segunda preparatoria hacia el Seminario Internacional del CIEC.  Esta vez lo que convocó al encuentro fueron los Modos de autoridad femenina donde pudimos escuchar a Gisela Smania y  Silvina Sanmartino representado al Departamento de Niños del CIEC-NRC –  y la Hemeroteca del CIEC, respectivamente, bajo la coordinación de Carolina Aiassa del Área de Enseñanzas.

Gisela Smania partió de la hipótesis sobre el movimiento que ha sufrido el sentido tradicional de la autoridad y los semblantes que la legitimaron. Ella se pregunta: ¿cómo incide este nuevo régimen del no-todo en un asunto como la autoridad? ¿Podemos hablar hoy de una feminización de la autoridad? ¿Hay un estilo diferente a la lógica masculina del prohibir-consentir? Resalta que cuando hablamos de autoridad femenina no nos referimos al poder de negociación, no apuntamos al sentido social del término. Para abrir este tema Gisela toma por un lado, la astucia de las niñas a la hora de tratar con el Otro de la ley, de la autoridad, consiguiendo transgredir algo de la ley pero sin confrontase a ella, como sería en la lógica masculina, y lo hacen a  través de la palabra, consiguiendo lo que quiere astutamente. Resaltando con el ejemplo de Marie Hélène Brousse que no se trata de un par antinómico sino que el todo y el no-todo no son contradictorios, no son complementarios sino que son órdenes diferentes. Por otro lado toma la autorización, en la dimensión de la autoría del sujeto y legitimación en los modos de gozar a través de la extensión de los derechos, por ejemplo.

Por su parte Silvina Sanmartino partió de una pregunta: ¿la autoridad es un modo de tratar lo real? Siguiendo a Eric Laurent señala que hoy, hay una ausencia de adhesión al principio de autoridad  y que esto puede observarse en la desresponsabilidad cotidiana de los sujetos. Que ya no se trataría de una autoridad falocéntrica sino que más bien, tal como lo señala Marco Focchi, que si hay algo que predice a la autoridad hoy, sería el acontecimiento, la sorpresa. Ella nos aclara que no se trataría de las mujeres sino de posiciones. La posición femenina arreglándoselas no con el poder de la negociación  sino con el talento, prescindiendo un poco del ideal.  Siguiendo a Laurent hace la distinción entre creerla y creerle, la primera en relación al superyó y la segunda en relación al síntoma que une.  
Fiel a su estilo Hemeroteca convocó al lector pasando revista mostrando ejemplos qué ilustraban su investigación.

Un aporte de la directora del CIEC, Adriana Laión, fue situar a la evaluación como paradoja donde también aparece como uno de los modos de autorización donde el problema es que este tipo de evaluación no orienta sino que sancionan. No orientan y por ende no afectando al cuerpo de un modo singular.

Será la oportunidad de continuar nuestro trabajo, el próximo 20 de marzo, con el tema:
“La feminidad emergente”

Presentan: Roxana Chiatti y Graciela Martínez del Departamento de estudios psicoanálisis y  cuerpo. Y  Claudia Lijtinstens y Dora Saroka por la Red de la EOL Sección Córdoba.
 Coordina: Marcela Piumetto

Los esperamos!!!

Analía Ghirardotto
Comisión organizadora del Seminario Internacional

Informes: Secretaría del CIEC



viernes, 15 de marzo de 2013

Nota 9


El título del seminario es un llamado al trabajo porque es provocador y a su vez requiere ciertas aclaraciones.
 Es indudable que los semblantes han cambiado y el lugar de la mujer especialmente. Hoy tenemos mujeres que comandan en la política y la ciencia.
Pero la feminización del mundo no se refiere a eso, sino a la primacía del goce por sobre los ideales. Se trata de la posición femenina, el modo de goce femenino que no se confunde con sexuación.
La primera diferenciación necesaria es la de posición femenina e histeria.
La histeria no siempre remite a la mujer, al punto que Lacán sugiere que el hombre es más cercano a la histeria y nombra a Sócrates como el primer histerico.
Lo que necesitamos precisar es la diferencia entre el objeto causa de deseo, y el objeto gozado. Cuando nos referimos al amor o al deseo, el sujeto está siempre en juego, en cambio cuando nos referimos al goce, el sujeto se anula. La histeria requiere de un sujeto que hace lazo entre el amor y el deseo. En cambio la posición femenina remite a un goce que excluye el sujeto.
Hablar de la feminización del mundo no es un camino hacia la mujer.  Es un recorrido que tiene al objeto de goce en el centro y que nos acerca a la perversión, porque se trata del objeto.
 La feminización del mundo, nos ubica a pensar desde el psicoanálisis un contexto que es más Almodovar que Bergman y nos obliga a inventar nuevas formas de abordaje para instituir el lazo allí donde parece imposible.
Es un desafío apasionante, porque estamos orientados por un real que cada vez, más lejos del freudiano, nos invita a reformular nuestra clínica.

Diana Pawlozky

Coordinadora del Programa de investigación: Cine, Psicoanálisis y otras miradas

domingo, 10 de marzo de 2013

Los Departamentos del CIEC

Los Departamentos de nuestro Instituto trabajan en sus investigaciones, promueven sus estados de trabajo, sus preguntas y sus avances hacia el próximo Seminario Internacional.
Próximamente en el Blog contaremos con diferentes intervenciones de nuestros colegas de los distintos Departamentos, contribuyendo a este espacio vivo de conversación y debate sobre La feminización del mundo.


. Departamento TyA
'Las mujeres han tomado la palabra'
Por Natalia Andreini
“Las mujeres han tomado la palabra”, son palabras que escuché en boca de Eric Laurent en una entrevista realizada por Jorge Coscia. Estas hicieron eco en mí y hoy me pregunto ¿qué quiere decir eso? ¿De qué manera? ¿Qué consecuencias? ¿Qué es tomar la palabra?
Ya bajo el efecto de estosinterrogantes encuentro,  en otro idioma que el nuestro, que existen en el mundo acontecimientos provocados por mujeres reunidas bajo un fin, mujeres que hablan desde los lugares que se dan, hablan. Algunos de estos acontecimientos son rescatados por la escritura de Dacia Maraini y publicados en el Corriere de la Sera, en Italia. Luego devenidos en un libro que desde su título parangona estos acontecimientos al producido por Antígona.  Reúne estos relatos  bajo el Significante de Antígona “I giorni di Antigone”.
 En el caso de Antígona, hija de Edipo,  con el fin de no dejar insepulto el cadáver de su hermano Polinices  transgrede la ley dictada por Creonte, quien decide acallarla encerrándola viva bajo tierra. Hoy siglo después no dejamos de hablar de ella. Con el acto de sepultar a su hermano podemos decir que “toma la palabra”, una palabra que lejos de hacerse eco de lo dictaminado por el gobernante de Tebas, Creonte, es la suya y a viva voz. Jamás oculta su responsabilidad subjetiva. Palabras encarnadas desde el comienzo y hasta el final.
“Donne per la Pace” es una coalición de mujeres árabes y hebreas, jóvenes y ancianas que viven en diferentes zonas de Israel, llevan adelante un proyecto: Inventar una cultura de la paz que no venga de la política y si de las familias, y que sean las mujeres las que proponen la paz partiendo de sus propios cuerpos.“Un cuerpo que para éstas ocasiones pierde su visibilidad sexuada, así común y necesaria al mercado, para devenir pura indicación de nutrición y afectividad”.
El artículo,entre otras cosas, describe un día de protesta contra el bloqueo de la zona ocupada, y cita las palabras de GILA SVISKY: “Estábamos fuera de la puerta de entrada del Pentágono israelino. Adelante del ministerio de defensa de Tel Aviv. Éramos un centenar de mujeres  vestidas de negro y llevábamos sobre el pecho un cartel con un escrito: Closure (Blocco) En hebraico, árabe e inglés. Con una señal un grupo comenzó a cruzar la calle muy lentamente, en el intento disminuir la velocidad del tráfico. Alguna mujeres se sentaron en el medio de la calle y se quedaron ahí con los carteles encarando los autos, un modo de hacer entender a los que pasaban qué quiere decir permanecer bloqueados”.
Un modo de hacer entender que no es sin el cuerpo. Sentadas bloqueando el tránsito. En el relato encontramos que eran sacadas por la policía y regresaban nuevamente al lugar del bloqueo a bloquear con sus cuerpos el tránsito. A hacer entender qué es estar bloqueados.
En el texto del Jacques Lacan “Lituraterre” encontramos que al discurso lo habita quien habla. Así, el discurso se habita. Diré, se habita no sin el cuerpo.
Son los primeros trazos para una investigación  a partir de lo propuesto  para el  Seminario Internacional del CIEC “La feminización del mundo”.
Un trayecto que se hace eco de las políticas que orientan al Campo Freudiano. Un modo de habitarlo.

'Las enamoradas en la era de la feminización'
Por Liliana Aguilar
El amor femenino, ese que algunas veces, puede llegar un poco demasiado lejos en las conseciones que está dispuesto hacer, ese al que más de una vez se tilda de “loco” puede ser, sin embargo, el que mejor puede enseñarnos acerca del amor. Si el amor, tal como lo propone Miller, “es reconocer su falta y darla al Otro”[1] tenemos que reconocer que esto se juega más específicamente de lado de lo femenino. El hecho de que La mujer no existe deja librada a cada una a la búsqueda de ser una. Y es, por lo general, en el terreno del amor donde ellas llevan adelante esta búsqueda a partir de reconocerse, una por una, en eso que son para él, disponiéndose, algunas veces, a cualquier precio a que el fantasma de ellos encuentre en ellas su hora de verdad.
Se comprende, entonces, porque las enamoradas han sido a lo largo de la historia y siguen siendo hoy en día grandes defensoras del amor frente a los distintos discursos que han intentado dominarlo, reducirlo o manipularlo. Podríamos dar muchos ejemplos. Tomemos el de Ida Dalser y Benito Mussolini. Cito, en este punto, lo que relata Marco Bellocchio, el director Italiano que lleva esta historia de amor a la pantalla grande: Me afectó enormemente esta mujer y su absoluta negativa a aceptar cualquier tipo de acuerdo. Después de todo, podría haber aceptado volver a las sombras y quizá, haber sido generosamente recompensada, lo que ocurrió con muchas de las otras amantes de Mussolini. Pero no lo hubiera aceptado. Quiso reclamar su propia identidad. No podía aceptar la traición de este hombre, al que como le decía en sus cartas, había amado profundamente dándole todo lo que tenía… No fue una persona que tomara decisiones en base a la mediocridad: de corazón, compartía los ideales del joven Mussolini, una cierta clase de posición heroica, intervencionista, antisindicalista, individualista y pensando en el futuro. Se enamoró completamente de un joven cuando aún no era nadie. Le defendió cuando estaba arruinado, atacado e insultado. Más tarde, la relación dio la vuelta y cuando todo el mundo amaba al Duce, a ella se la dejó fuera y todo el mundo se le volvió en contra. Motivada por su amor salvaje, incapaz de darse cuenta de quién tenía las de ganar, fue contra toda Italia, que entonces empezaba a abrazar el fascismo y a alinearse con Mussolini. El comportamiento de Ida Dalser, con su valor al enfrentarse al Duce y su negativa a rendirse, rebelde hasta el final, me recuerda a ciertas heroínas trágicas. Antígona me viene a la mente, pero también otras como Aída, por ejemplo. Y en este sentido, la película es también un melodrama sobre la invencibilidad de una pequeña mujer italiana que no podía ser reducida por ningún poder, y de alguna forma, es ella la que gana”[2].
Aunque los tiempos han cambiado mucho desde entonces, esta función del amor femenino se mantiene. Justamente, es lo que Eric Laurent nos propone cuando reconoce ese estilo erotómano, propio del amor femenino, como aquello que hace obstáculo al individualismo de masa[3]. El amor en el siglo XXI pareciera estar enmarcado entre dos tipos de discursos: por un lado, el individualismo  que propone sobre la base de un hedonismo moderno hacer del amor un contrato igualitario en donde cada una de las partes, ateniéndose a las mismas cláusulas, podría saber de antemano lo que puede llegar a pasarle, lo que puede esperar del otro. Pretendiendo evitar lo inevitable, el malentendido, el imprevisto, el riesgo, este amor post-moderno se propone como una solución calculada que estaría en condiciones de asegurar el bienestar. Por otro lado, tenemos las neurociencias que en conjunto con el cognitivismo nos proponen el santo remedio. El enigma de la femeneidad podrá ser develado y los impasses del amor superados a partir del estudio y de la manipulación de los cerebros humanos.
Las enamoradas vienen en este punto a romper estos esquemas haciendo valer esa dimensión enigmática, inapresable, indomeñable del amor que entiendo que tiene que ver con eso que hace a lo particular del estilo erotómano de sus amores: apuntar a lo más singular del Otro para volverse su síntoma.                                                                                    



[1]Miller, J-A., “Amamos a aquel que responde nuestra pregunta: ¿Quién soy yo?”, Entrevista llevada a cabo por Hanna Waar para la Psychologies Magazine, octubre 2008, n° 278.



[2] Entrevista a Marco Bellocchio por Escribiendocine-Noticine. www.rockdelux.com/radar/p/marco-bellocchio-vincere.html - España.


[3] Laurent, Eric. “El sujeto de la ciencia y la distinción femenina”, Conferencia dictada en las  XXI Jornadas Anuales de la EOL: La clínica de lo singular frente a la epidemia de las clasificaciones, Buenos Aires, Diciembre 2012.


.Departamento de Investigación de Psicoanálisis con niños - NRC
'¿Cómo pensar el funcionamiento de los padres en la época actual?'
Por Gabriela Chiavassa
"JAM sostiene que el fenómeno más importante del siglo XXI es la "aspiración a la feminidad".
La propia expresión "aspiración a la feminidad" indica algo que se manifiesta como tendencia. Como algo que no estará nunca plenamente realizado.
En el "Reverso del Psicoanálisis", Lacan plantea la tesis de que en la medida que el sujeto es reducido a un objeto por el discurso de la ciencia se produce el efecto feminizante que es el objeto "a", tanto para el hombre como para la mujer.
Miguel Bassols propone distinguir feminizaciones diversas en la lógica que Lacan expone. Una, que pasa por el objeto "a"(cuando la ciencia reduce al sujeto a objeto). Y la otra forma de feminización, va en la lógica de la inexistencia, que es donde aparece la dimensión del sujeto y la invención.
El capitalismo y la ciencia aceleraron y cambiaron la época. El sujeto cambió. La figura del padre humillado se impone. Comienzan a aparecer mujeres ocupando lugares de padre.
Con todos éstos cambios profundos, cambia el Otro social, hay consecuencias en los sujetos y en los lazos de parentesco. Así, la forma "tradicional de autoridad" entra en crisis.
La lógica masculina de la autoridad tradicionalmente funcionaba prohibiendo y consintiendo, ejerciendo un control. Y en la posición femenina la autoridad es lo que da el lugar. El goce no se localiza en el falo. La autoridad es un lugar simbólico. Y en la posición femenina, la mujer se pone en juego a sí misma, ofreciendo su presencia.
¿Cómo pensar el funcionamiento de los padres hoy?¿Surgen nuevas formas de ser padre?¿Padres feminizados?"